India pinta bien

Jueves 09 de Marzo 2017.-

Comenzó el hexagonal final del sudamericano sub-17 y buenas fueron las noticias para Chile, que partió con el pie derecho de cara a conseguir la clasificación para el mundial de India.

Y es que además del triunfo sobre Venezuela, están dadas todas las condiciones en Rancagua para que ello se produzca, con un público notable, que ha alentado de manera ejemplar a nuestra selección.

En un análisis comparativo, en función de lo que han mostrado hasta acá los equipos, los rivales a vencer (o dejar afuera) eran claramente Ecuador y Venezuela, y ya pasamos con éxito la primera valla.

En ese sentido, me parece altamente probable que logremos un cupo para la cita planetaria, cuestión que sería muy notable e importante, dado que han  sido demasiados años de ausencia en esta categoría en un torneo de primer orden.

Mis proyecciones apuntan a que Brasil debiera ganar este certamen, dado el buen nivel que ha exhibido en todo el campeonato. También ha mostrado cosas interesantes Colombia, que me parece igualmente un candidato seguro. Y más allá del buen empate que logró ante la verdeamarela, Paraguay es un cuadro fuerte, que juega de modo muy inteligente y que tiene por lejos al mejor centro delantero del sudamericano, lo que marca una diferencia vital. 

Volviendo al caso de Chile, la fortaleza principal de este grupo está dada por el temple a toda prueba que han mostrado sus jugadores, con una fuerza de voluntad, pundonor y capacidad de sacrificio colectivo, que los ha llevado a estar en las instancias finales más allá de todos los ripios o la falta de figuras descollantes.

En todo caso, cabe destacar el excelente trabajo que han realizado futbolistas como el arquero Junior Bórquez o el lateral Yerco Oyanedel, lo cual de paso, viene a refrendar que uno de los puntos más destacados de Chile es su bloque posterior.

Adicionalmente, me parece que ya es posible visualizar de manera clara la idea futbolística que desea plasmar Hernán Caputto, la cual dice relación con tener un equipo intenso, que basa su juego en la fuerza y el empuje. Esto se aprecia sobre todo cuando Chile pierde el control del balón, ya que ahí ejecuta una rápida transición para replegarse y defender con éxito su arco (de hecho ha recibido muy pocos goles). En contrapartida, en la faceta de ataque, la selección no se caracteriza por la generación de muchas situaciones, pero sí sus atacantes consiguen resolver con gran efectividad las opciones disponibles.

Si sumado a esto elementos, el cuerpo técnico consigue manejar adecuadamente la natural ansiedad que pueda tener el grupo en este hexagonal definitorio, los pasajes para India pueden volverse una realidad. 

 

Por: Iván Álvarez 

Entrenador de fútbol y comentarista de CDF